Camiones (un soneto)
Estaban los camioneros en huelga
Pero no veía yo camioneros
Estarían, puede, en sus agujeros
Rumiando odio, imaginando que cuelga
Cada político, cada empresario
De una cuerda... O soñando esto tranquilos
Eran sus caballos de cien mil kilos
Monturas dormidas fuera de horario
Los que dejaban su impronta en mi almario:
Extraordinaria caterva, bestiario
Acero, caucho y barrigas vacías
Ellos muertos de hambre mientras el hombre
Se enreda fiero y fenece en porfías
Como abandonados niños sin nombre.
Bravo, me encanta.
ResponderEliminar