La sombra del árbol en el ábside De las ruinas de la iglesia, en Cazorla De Santo Domingo de Silos. Orla Esa sombra, en la invertida clámide De piedra vieja, a esta hora de la tarde Firma de Dios, aguatinta pasmosa Árbol hecho de negrura gloriosa Pintado por ese otro Dios, Sol que arde Orla, digo, de forma incomparable Aquesta incólume pared vetusta Impávida al paso de tantos siglos Tarde, ruinas, sombra: tan agradable... Pero me amenaza la noche adusta: ¡Llévome la sombra, oscurezco Silos!