El puto San Mateo 7,7-12
Me he metido dentro del cubo de la basura para buscar mi desayuno No bastó con alargar la mano No bastó "pide y se te concederá" Pedí, sí, y una voz detrás de mí (En forma de parábola Sería un viejo usurero o algo así) Que supongo era la del "maligno" Me dijo: "Anoche vi cómo tiraron allá al fondo las sobras del restaurante aquel donde van a comer los señores" Y he aquí que hundí mi cuerpo en el contenedor Y buceé kilómetros y kilómetros de basura, mierda, podredumbre Arrastrándome entre cristales rotos Deslizándome sobre clavos oxidados Respirando las miasmas de trapos que limpiaron vómitos, de pañales mal cerrados Y llegué aquí, al fondo A las frías sobras de anoche A mi desayuno Y una absurda sensación de triunfo llena la mente miserable de este rufián ¡¿Habrá alguien en el planeta capaz de entender mis versículos?!