Tres cubitos de hielo
El primer hielo se deshizo en whisky
Murió embriagado, feliz, nostálgico
La nostalgia era su naturaleza
Y por eso andaba siempre en el fondo
(Es el lugar, en una cubitera
Más peligroso:si el calor ataca
Empiezan a fundirse los de abajo
Los cubitos más viejos llaman a esto
«Terrible y caliente charco de muerte»)
Y el camarero, que era maniático
Sacó el primer hielo justo del fondo
Lo bañó en whisky y se lo ofreció al hombre.
Así murió el primero, consumido
Convertido en sangre de un alcohólico.
El segundo cubito fue picado
Así, sin avisar, para un mojito
Mezclaron con hierba buena sus trozos
Con ron, con lima y no sé qué más: mierda
Sus restos no sirvieron para nada
(Deshacerse en el whisky es mucho mejor)
Picado para una bebida moña...
El tercer cubito, envuelto en un trapo
Murió consumido por un vampiro
Bueno, por el chichón de un niño tonto
De esos que sin parar gritan y saltan
Lo mismo que un vampiro: un asesino
Aquellos pobres restos derretidos
Quedaron impregnados en el trapo
Y éste, a su vez, hundido en la basura.
Derretirnos: nuestra esencia y destino
Morir, consumidos por el sediento
Perder por el calor del mundo el frío
Salir de la cubitera, no volver.
La puta vida y su asfixiante ley del avance. Maravilloso poema.
ResponderEliminarDestaco: Convertido en sangre de un alcohólico. Picado para una bebida moña...
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